El PSOE quiere suprimir el Arzobispado Castrense de España.

Jesús Caldera, conocido miembro del PSOE, ha asegurado hace algunos días la intención del Gobierno de Zapatero de eliminar el Arzobispado Castrense de España, encargado de la asistencia religiosa de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y sus familias en todo el territorio español y allí donde el Ejército se haga presente.
Estas declaraciones las hacía en medio de una cena con colectivos homosexuales en los que fue preguntado sobre varios temas, que no tenían nada que ver con el tema que se pretendía tratar, la Ley de Trato. El ex – ministro de Trabajo aseguró que, la supresión del Arzobispado Castrense, era uno de los objetivos dentro de los planes laicistas pretendidos para nuestro país.
El Arzobispado Castrense de España ha estado presente en medio de nuestras tropas desde mediados del siglo XVII, aunque ya desde la Edad Media estaban presentes en los que se pueden llamar ejércitos, pero que no eran de manera permanente. Solo durante la Segunda República desaparece el Arzobispado Castrense, que se declara extinguido en el año 1936. Es en el bando nacional cuando vuelve a proporcionarse este servicio a las tropas y que perdura hasta nuestros días. Hoy día el Arzobispado Castrense tiene arzobispo propio, Monseñor Juan del Rio y las demás instituciones de una iglesia particular, como seminario propio.
Cabe recordar a quienes planean la desaparición de esta Arzobispado que la asistencia religiosa es un derecho constitucional y no un capricho de la Iglesia Católica y que por lo tanto tiene que asegurárseles a nuestros militares, guardias civiles y policías nacionales la asistencia religiosa. Por otra parte, José María Contreras, encargado de las relaciones con las confesiones religiosas, asegura “que el Estado prevea la posibilidad de que los miembros de las Fuerzas Armadas puedan abandonar las instalaciones militares para recibir la asistencia religiosa”, y que “sólo cuando lo anterior no sea posible el Estado recurra a la figura del capellán castrense”. Nuevamente otro ataque más contra los orígenes cristianos de nuestra nación y contra la libertad religiosa.


Fuente: El Nuevo Alcazar (www.elnuevoalcazar.es)