La ofensiva marroquí contra la soberanía española se desarrolla, a lo largo de los últimos años, conforme al plan trazado por el régimen alauita. El objetivo final de esta ofensiva es la ocupación de Ceuta y Melilla. Marruecos dosifica la presión contra España conforme a su proyecto, incrementando o disminuyendo la misma según las circunstancias. Utiliza indistintamente a las asociaciones civiles, a su ejército (como en la ocupación de Perejil) o a las instituciones del régimen para escenificar el enfrentamiento e indisponer a la población marroquí contra España. La última entrega ha sido la aprobación en el Parlamento de una moción instando a su Gobierno a "reabrir el asunto de Ceuta y Melilla".
La respuesta del Gobierno de España ante esta escalada está siendo enormemente irresponsable. Empeñarse en ignorar las agresiones marroquies invocando una supuesta amistad desmentida por la hostilidad de Marruecos sólo está sirviendo para envalentonar al régimen de Mohamed VI. ¿Hasta cuándo va el Gobierno a responder con una sonrisa a las afrentas de Marruecos?.
Fuente: Web de FE-JONS (www.falange.es)
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