La Abogacía del Estado entierra la iniciativa de Vic.

Ante la iniciativa del ayuntamiento de Vic de negar el padrón a los inmigrantes ilegales, el gobierno ha dado un golpe sobre la mesa para evitar se lleven a cabo medidas, que frenen el acceso de las personas que no se encuentran en situación legal, a los mismos servicios, que los que contribuyen para que estos sean realidad.

Así, el Ministerio de Justicia ha decidido que “no resulta procedente denegar la inscripción so pretexto de que el ciudadano extranjero no reside legalmente en España”.

Según la Abogacía del Estado “la inscripción de los extranjeros en el padrón municipal procede con independencia de que los mismos tengan o no residencia legal en territorio español”, de lo cual se desprende, que cualquier persona que llegue a España, aunque sea de vacaciones, pueda empadronarse y acceder cuando le venga en gana, a cualquier servicio, como cualquier otro vecino -real-.

Es evidente que esto ha venido siendo así durante años y que lo único que ha hecho el gobierno es recordarlo; De hecho, ciudades como Barcelona, llevan tiempo generando un gran efecto llamada, por la facilidad con la que cualquier persona puede empadronarse en la capital catalana.


Fuente: El Nuevo Alcazar (www.elnuevoalcazar.es)