Ya se ha cumplido una semana desde la aplastante victorial electoral del Partido Popular en las urnas. No ha habido cambios... en realidad, es demasiado pronto para esperarlos.
No obstante, no todos los habitantes de España entenderemos lo mismo por “cambio”.
Algunos, los más conformistas, se darán por satisfechos con que vuelva a haber trabajo y créditos bancarios para todos... aunque sea a costa de seguir llenando los bolsillos de los usureros; para otros, los “antisistema”, “extremistas” y “fanáticos”, no podrá haber cambio mientras sigan muriendo niños inocentes que aún no han llegado a nacer, se continúe negociando la unidad de España, sigamos manteniendo a políticos ociosos y vividores y, finalmente, mientras los trabajadores de toda clase sean considerados y utilizados como herramientas de un sistema capitalista manchado de sangre... ¡No, así nunca podremos decir que ha habido un cambio!...
No sé cuanto tardará el sistema capitalista, en la zona española, en volver a reajustarse y posicionarse en la posición de las llamadas “vacas gordas”. Lo que sí sé es que, cuando llegue ese momento, se nos venderá que habrá sido gracias a Mariano Rajoy, el Partido Popular y la economía de libre mercado. En ese momento, la gente dejará de preocuparse de la “memoria histórica”, el aborto, la crisis de valores... ¿Para qué? ¡Si tendrá, otra vez, dinero con el que comprar la basura materialista que llene el hueco de sus vidas vacías de sentido!
Sinceramente, la victoria electoral del Partido Popular resultó más aplastante de lo que jamás había pensado... se nota que la gente no tenía muy claro que era eso del neoliberalismo (aunque si la gente tuviera claro lo que vota, tampoco apoyaría a la socialdemocracia del PSOE, el pseudomarxismo de Izquierda Unida, a los abertzales de Amaiur...).
Este 20-N ganaron los mismos que hubieran ganado de haber vencido en las urnas el PSOE: el Sistema, alias capitalismo (y el que no se lo crea, que se pregunte por qué un partido “de izquierdas” indulta a un alto cargo de un banco privado de los delitos de los que es acusado).
Nos espera una etapa que se marcará por los recortes y la dejadez de las instituciones hacia los menos desfavorecidos... pero que nadie se preocupe, que habrá trabajos temporales y préstamos para todos. Bienvenidos a la democracia liberal del Partido Popular.
Gabriel García
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