Gregorio Manzano debuta con victoria en el banquillo sevillista.

Gregorio Manzano se estrenó este jueves como nuevo entrenador del Sevilla con un afortunado triunfo (0-1), en la segunda jornada de la fase de grupos de la ''Europa League'' ante el potente Borussia Dortmund, que permite a los hispalenses mirar con confianza al futuro en este torneo, y enjugar así, la derrota de hace dos semanas frente al Paris Saint Germain.

Y es que, pese a la victoria, a Manzano le queda mucho por hacer con un equipo que sigue sin enamorar y, por momentos, parece no terminar de enterarse a qué juega. En el once inicial nervionense resaltó el ''tridente'' formado por Cigarini, Guarente y Zokora. Los germanos, por su parte, oponían también un 4-2-3-1, aunque el choque sólo ofrecía, en principio, la movilidad del japonés Kagawa en los locales, y el orden táctico, lleno de cautela, de los visitantes.

Pero al Dortmund, por lo menos, se le notaban intenciones, con subidas al ataque que bastaban para mantener al Sevilla a raya. Por eso, pasado el minuto 20, los teutones se convirtieron en claros dominadores y se fueron a por el gol, con dos cabezazos a bocajarro de su delantero, Barrios que, sobre todo en el segundo caso, no entraron porque Palop lo evitó.

Sólo una llegada de Luis Fabiano en el minuto 35 demostró que los blanquirrojos seguían sobre el campo, aunque el paulista no vio a Navas, que estaba solo en la derecha. La respuesta alemana se produjo con la ayuda de Guarente, muy desacertado, que dejó a Palop en un mano a mano ante Barrios, providencialmente resuelto por el valenciano.

Pero, como suele pasar en el fútbol, el Sevilla marcó cuando menos se esperaba. Porque una falta botada desde la diestra, en el tiempo añadido de la primera mitad, permitió a Cigarini recoger el rechace, para rematar a gol, en uno de esos momentos denominados psicológicos.

Eso no pareció afectar al Dortmund, que en el primer minuto de la reanudación avisó por medio de Kagawa. Pero la noche se había vestido de sevillista, ya que en el minuto 49 el lateral zurdo alemán, Schmelzer, que ya había visto una amarilla, fue expulsado al entender el árbitro que había simulado una caída.

El Borussia Dortmund tenía que remontar con un hombre menos y Manzano decidió reforzar su ataque, con la salida del autor del gol, Cigarini, en favor de Kanouté, todo un especialista en rematar faenas. Sin embargo, se echaba en falta la aportación de Navas, sobre todo ahora que su banda había quedado ''coja'' en el rival y, sobre todo, extrañaba que el Sevilla se conformara con seguir en su campo la mayor parte del tiempo.

Por eso, no extrañó que en el 70 Kagawa estrellara el cuero en la madera. Sin embargo, el esfuerzo físico acabó por agotar al Dortmund. Todavía hubo lugar para una salida fallida de Palop, que obligó a Cáceres a salvar el empate en la línea de gol. Pero el Sevilla, que se había encontrado con un botín inesperado, supo sufrir y se conformó con su magra renta, para sumar, así, sus 3 primeros puntos en la competición.



Fuente: AS (www.as.com)