Llorente aumenta las dudas del Atlético de Madrid.

El Atlético de Madrid de Manzano entró en coma tras su paso por San Mamés, de donde salió derrotado con holgura por el Athletic en un encuentro muy parejo durante la primera mitad y de claro dominio vasco tras el descanso. Los tres goles del partido llegaron en el segundo tiempo y en tan sólo ocho minutos, los que fueron del 68 al 76. Fernando Llorente abrió el marcador con algo de fortuna y lo amplió con un preciso cabezazo tras un gran centro de Toquero desde la banda derecha. Fue precisamente el delantero vitoriano el encargado de completar la goleada con un nuevo remate de cabeza tras un saque de falta de Ander Herrera. Los de Bielsa suman once puntos en Liga de los últimos quince disputados, mientras que el Atlético acumula ya siete encuentros sin ganar y Manzano queda contra las cuerdas.

El pitido inicial dio comienzo a una lucha a tumba abierta por parte de los dos equipos en busca del primer gol del partido. Locales y visitantes se lanzaron al ataque en un encuentro que comenzó con un ritmo trepidante y en el que el juego en el centro del campo brilló por su ausencia. Con esta intensidad, no tardaron en verse los primeros acercamientos con peligro a las áreas de Iraizoz y Courtois. Reyes fue el primero en probar suerte con un disparo lejano que se marchó fuera y que precedió a la primera ocasión del Athletic, en las botas de Llorente y desbarata por Miranda. La velocidad del partido no dio posibilidad de respiro a vascos y madrileños y acto seguido Falcao rompió a Amorebieta obligando a Iraizoz a emplearse a fondo para evitar el primero con una gran intervención. Filipe y Llorente estuvieron cerca de abrir la lata con sendos intentos poco después.

El Athletic sufrió un contratiempo al cuarto de hora de partido con la lesión de Fernando Amorebieta, que se vio obligado a abandonar el terreno de juego por una lesión en los isquisurales del muslo derecho dejando su puesto a San José. Ninguno de los dos equipos levantaron el pie del acelerador durante la primera mitad, aunque sí es cierto que en la recta final antes del descanso los dos conjuntos no pudieron finalizar sus jugadas de ataque como sí hicieron en el eléctrico comienzo. Los de Bielsa se acabaron haciendo con el peso del partido y tuvo la opción de marcharse con ventaja al intermedio con una ocasión de De Marcos que Courtois mando a saque de esquina con solvencia. Justo antes de enfilar el túnel de vestuarios, San Mamés se sobrecogió al ver totalmente torcida la rodilla de un Fernando Llorente que, tras pedir el cambio, se recuperó y pudo continuar.

El partido se reanudó bajo el diluvio universal y con la entrada de Ander Herrera en sustitución de Javi Martínez en el equipo local. El Athletic continuó con la misma tónica con la que acabó el primer acto, llevando el peso y la iniciativa en un choque en el que comenzó a desnivelar a su favor la balanza de la posesión del esférico. A Gregorio Manzano, con gesto muy serio durante los noventa minutos, no le gustaba lo que veía en el césped y movió ficha sin que se llegara a cumplir el cuarto de hora del segundo tiempo retirando a Reyes para dar entrada al argentino Salvio. El dominio bilbaíno comenzó a dar resultados con las primeras ocasiones locales del segundo asalto. De Marcos remató desviado un preciso centro de Aurtenetxe que estuvo cerca de inaugurar el electrónico.

La sorprendente decisión de Bielsa de retirar a su hombre más activo, Iker Muniain, para dar entrada a Toquero fue la antesala de la jugada que acabó de romper el partido. Fernando Llorente abrió el marcador tras un gran recorte en el área y la colaboración de Filipe Luis, que desvió el balón de forma decisiva. Tan sólo tres minutos después, a falta de veinte para la conclusión, el delantero internacional del Athletic daba el golpe definitivo al Atlético marcando de cabeza el segundo gol de los suyos aprovechando un centro perfecto de Toquero desde la banda derecha ante el que Miranda mostró una pasividad igual de enorme que sorprendente. Con el conjunto colchonero herido grave y deambulando por el campo, Toquero puso en pie a La Catedral redondeando la goleada con el tercero de la noche tras un saque de falta de Ander Herrera desde la banda izquierda.

Durante los nueve minutos en los que el Athletic acribilló a su rival con los tres goles, Manzano intentó frenar la sangría sobre la marcha con las entradas de Pizzi y Koke en sustitución de Arda Turan y un desaparecido Diego. Presos de la desesperación y la impotencia, los jugadores del Atlético endurecieron su juego empañando la correcta actitud mostrada por locales y visitantes durante todo el encuentro. Con la victoria, el Athletic suma tres puntos de oro en su lucha por borrar el mal comienzo de temporada liguero y acercarse a puestos europeos. Los de Bielsa suman ya cinco jornadas consecutivas sin conocer la derrota, en las que ha sumado once puntos de quince posibles. La otra cara de la moneda es para su rival, que acumula ya siete encuentros sin ganar, queda a tres puntos del descenso y adquiere un cariz muy preocupante en cuanto a su juego.


Fuente: AS (www.as.com)