Zapatero dejará en la misma situación de quiebra a España que Felipe González.

El candidato del PSOE a las próximas elecciones generales, Alfredo Pérez Rubalcaba, sabedor de una fuerte derrota electoral, según apuntan las encuestas, recurre al ex presidente del Gobierno, Felipe González, para animar el voto entre los suyos. De hecho, González apuntaba el pasado 1 de octubre que "no sé si me invita como agitador agitado o rebelde que no se conforma con un partido que se siente derrotado". Al término de esa Conferencia, González, que puso en pie al auditorio como nadie, dejó en su despedida una oferta que más valdría rechazar. "Estoy aquí Alfredo para lo que quieras, para antes o para después”, dijo ante una militancia a la que hasta se le pasó un instante por la cabeza la vuelta del histórico líder aunque no tuviese ni un solo viso de credibilidad.

Rubalcaba intenta así frenar la espiral derrotista en la que se encuentra el PSOE, pero con González en el poder, los datos económicos reflejan la mala gestión de los socialistas con el dinero público de todos los ciudadanos

Y es que, el hundimiento económico de la España de Felipe González fue sonado. Si pensaban que la herencia de José Luis Rodríguez Zapatero era pésima, que deja el Gobierno con casi 5 millones de parados, la de González tampoco se quedó corta, en cuanto a lo negativo. En 1993, la economía española registró una recesión y llevó al PIB al -1%. En 1994, la economía registró un crecimiento del 2,4%, del 5% en 1995 y del 2,4% en 1996, aunque sólo tres meses duró entonces el Gobierno socialista, ya que las elecciones fueron en marzo de ese año.

En comparación con Zapatero, el crecimiento tuvo un comportamiento bastante mejor hace 18 años que ahora. Y es que, España ha registrado desde el tercer trimestre de 2008 hasta el último trimestre de 2009 una fuerte recesión, un año y medio con crecimientos negativos intertrimestralesParo

El principal recorte social, el drama del paro, es un elemento común tanto con González como con Zapatero. La prensa publicaba entonces "España, líder de paro en Europa", una frase demasiadas veces repetida en esta crisis, por desgracia. Y es que, el PSOE es perfectamente comparable a una fábrica de parados. En porcentajes, la tasa de paro en 1993 duplicaba a la de algunos países del Viejo Continente, como ahora casi triplica la media de la Eurozona.

De esta forma, la tasa de paro en España en el primer trimestre de 1993 llegó al 17,6%, subiendo paulatinamente al 18,4% en junio de ese mismo año, al 19% en septiembre y cerrando esos doce meses en el 19,4%.

La progresión es significativamente mejor que la realizada por Zapatero, que empezó el 2008 con una tasa de paro del 9% para cerrar el año en el 14,9%. En 1994, la historia se repite en enero, la tasa alcanza el 19,6% para cerrar el año en el 19,1% con picos en verano del 19,8%. En el 2009, Zapatero empezó enero en el 15,8% para cerrar esos doce meses en el máximo anual, 19%. En el comienzo del '95, González peleaba entonces contra un paro del 18,7%, el ex presidente terminó el año con una tasa de paro del 18,4% frente al 21,52% de Zapatero.

Si de algo no deben estar orgullosos los socialistas es del paro juvenil, reforma laboral incluida en aquella época y casi con las mismas críticas que la actual legislación tanto por parte de la patronal como de los sindicatos. Y es que, en 1993, España ya era portadora del estigma del paro juvenil. En 1993, el desempleo de los menores de 25 años alcanzaba el 37,1% frente al 20,4% de Zapatero. La progresión de González se incrementaba mes tras mes y cerraba el año en el 41,8%, con picos superiores al 42%, como en el mes de septiembre, es decir, cuatro de cada diez jóvenes se encontraban en la calle. Con Zapatero, la tasa de paro registró una subida sin precedentes, en su primer año de la segunda legislatura la tasa juvenil cerró en el 31,2% y eso que venía de prometer el pleno empleo en las elecciones de marzo de 2008.

Durante los años sucesivos, el Gobierno de González no llegó a bajar la tasa de desempleo juvenil del 38,8% pasando numerosas veces por encima del 40%. Un hecho que Zapatero ha superado con creces, llegando la tasa de paro juvenil al 46,2% en agosto de este mismo año. Es decir, casi uno de cada dos jóvenes se encuentra sin trabajo.

Déficit

En cuanto al déficit, González dejó a España en 1993 con uno del 7% del PIB. En 1994, fue del 6,6%, al igual que en 1995. Ya con Aznar, el déficit bajó al 4,95% en sólo 9 meses. Entonces, no había unos tipos de interés únicos para Europa, sino que los bancos centrales de cada país podían echar mano de la devaluación de la moneda y de la manipulación de los tipos de interés a su antojo. Unas herramientas que permitieron capear mejor el temporal que ahora. Además, de las conocidas privatizaciones como la de Aerolíneas Argentinas.

Ya que las economías dependen de las decisiones del Banco Central Europeo y de las imposiciones que da Bruselas a los países que no han sabido hacer los deberes y que han vivido durante muchos años del despilfarro y por encima de sus posibilidades.

Con Zapatero en el poder, el déficit en 2008 fue del 4,1%, frente al disparado 11,2% en 2009 y del 9,3% en 2010. El Ejecutivo continúa manteniendo que será capaz de reducir el déficit hasta el 6% este año, un hecho "improbable" según los Servicios de Estudios del BBVA, Santander y FUNCAS.

Inflación

En cuanto a los precios, los expertos en 1993 apuntaban que la única manera de salir de una economía sin crecimiento y con unos precios disparados era recurrir a las devaluaciones de moneda. Así, la inflación en España al comienzo de 1993 era del 4,7% y cerrando el año en el 4,9%. La situación económica no mejoraba por el bajo consumo pero esto no impidió que el Índice de Precios al Consumo escalara hasta el 5,1% en 1995.

En cuanto a la actual crisis, la inflación subió con fuerza hasta el 5% en el segundo trimestre de 2008 aunque las políticas monetarias del BCE y del resto de bancos centrales hizo que se bajara drásticamente hasta el -1% a mediados de 2009, registrando así la temida deflación, una situación que recordaba a la década perdida de Japón. Y a la que se han hecho numerosas referencias en estos tiempos.

Morosidad

Pero si hay algo en lo que ha destacado González ha sido en morosidad, la mayor de la historia socialista en España. En 1993, en plena crisis financiera y con el crédito cortado, la morosidad se disparó al 9%, bajando al 7% en el 1994 y al 5,5% en 1995 y del 5% en 1996. En la economía de Zapatero, la morosidad ha alcanzado los niveles de 1994, en el 7,14%, aunque los expertos no descartan que se registren tasas no vistas desde 1993.

Llegados a finales del mandato de González, el Gobierno tuvo que prorrogar los Presupuestos del Estado al tener que adelantarse las elecciones por el escándalo del GAL, la lucha ilegal contra ETA. De esta forma, el PSOE puso en marcha medidas para recortar el gasto público, pero subió el sueldo de los funcionarios y las pensiones en un 3,5% pero la tarifa de IRPF, deducciones y rentenciones se actualizaron también en un 3,5%. Además, las pensiones subieron un 0.9% ese año mientras que se subió el impuesto sobre alcohol y tabaco en el mismo porcentaje que la inflación. El objetivo de déficit era del 3,5% para 1996, sin embargo ese año, el déficit se cerró en el 4,95%.



Fuente: La Gaceta (www.intereconomia.com)