180.000 efectivos velarán por la seguridad en el Mundial de Sudáfrica.

El nueve por ciento de la población sudafricana tiene miedo. Son los blancos del país y esa sensación les hace levantar muros y alertar a los visitantes. Pero, ¿concuerda el crimen con el recelo? Nadie discute que la falta de seguridad es uno de los problemas más serios a los que se enfrenta el país, pero desde otros foros se advierte que las cifras deberían ponerse en perspectiva. "Han sido tomadas todas las medidas para asegurar el buen desarrollo de la ceremonia y de la competición", dijo ayer Sally de Beer, portavoz de la Policía.

El país africano ha gastado 60 millones de euros en el reclutamiento de más de 44.000 nuevos policías y equipamiento (helicópteros, cañones de agua, chalecos antibalas), para un total de 180.000 efectivos de las fuerzas del orden.

Han sido construidas celdas para albergar delincuentes en los propios estadios y funcionarán tribunales especiales para juzgarlos con rapidez. Se ha restringido el espacio aéreo en las cercanías de los estadios y las Fuerzas Armadas están preparadas para intervenir si fuera necesario. Equipos antiminas, helicópteros y la cooperación de Interpol completan el dispositivo de seguridad.

Mientras tanto, los visitantes se preparan: por primera vez, la federación inglesa ofreció información a los corresponsales sobre asuntos de seguridad (secuestros, armas de fuego, reducción de riesgos) y advirtió que el país "es hermoso, pero de noche es un animal muy diferente".

Pero hay otros datos que podrían traducirse en un exceso de miedo. En 15 años, la tasa de asesinatos se ha reducido en un 44 por ciento. La cifra sigue siendo muy alta (50 homicidios diarios), pero, en un 80 por ciento de los casos, la víctima y el criminal se conocían. Las estadísticas son similares en casos de violación, asalto o intento de homicidio, y las mayores amenazas a la seguridad son el robo a domicilios y el hurto de coches.

A pesar de ello, "en las seis semanas del Mundial de Cricket, en 2003, estos crímenes no se redujeron, pero no estuvieron conectados directamente al torneo", afirma Welile Nhlapo, consejero del gobierno sudafricano en temas de seguridad. En todo caso, las autoridades recomiendan no 'anunciarse' fuera del entorno deportivo.



Fuente: AS (www.as.com)