La declaración de los padres de Marta del Castillo y un careo entre Miguel y Samuel marcan el juicio.

La declaración de los padres de la joven Marta del Castillo y un careo entre el asesino confeso, Miguel Carcaño, y su supuesto cómplice, Samuel Benítez, han marcado la cuarta jornada del juicio que se sigue en la Audiencia Provincial de Sevilla por la desaparición y el presunto asesinato de la joven la noche del 24 al 25 de enero de 2009 en una vivienda de León XIII.

Al inicio de la vista oral, el abogado que ejerce la acusación particular en nombre de los padres de la joven ha pedido un careo entre ambos acusados para aclarar las "contradicciones" en torno a "quiénes y cómo" hicieron desaparecer el cuerpo. Hay que recordar que Miguel implicó a Samuel en las tareas para hacer desaparecer el cuerpo, extremo que el segundo negó.

Tras ello, el tribunal ha aceptado la práctica de la prueba solicitada, aunque ésta no se llevó a cabo hasta que concluyeron las declaraciones de los ocho testigos citados para este lunes, entre ellos el tío y los padres de Marta, quienes han dicho estar "desesperados" por encontrar el cuerpo de su hija para, así, "tener un descanso" y terminar con la "tortura infinita" que supone no poder enterrar a la joven y escuchar las distintas versiones de los acusados.

El padre de Marta ha relatado que sobre las 22,30 horas Marta no había vuelto a casa, por lo que "nos preocupamos" y, después de llamarla varias veces sin obtener respuesta, Eva Casanueva "llamó a varios amigos de Marta para ver si sabían algo de ella", entre ellos al 'Cuco', a Samuel Benítez y a Miguel Carcaño, "quien dijo que había dejado a mi hija a las 21,30 horas en casa".

EN EL PISO DE LEÓN XIII "NO HABÍA LUZ"

Por su parte, la llamada a Samuel se produjo sobre las 23,40 horas, y este acusado "le dijo que, según sabía, Miguel había dejado a Marta en casa a las 00,00 horas, cuando ni siquiera era esa hora". Sobre las 00,30 horas, "me dirigí a León XIII" y, una vez allí, "toqué" la persiana del salón, que estaba "echada, pero no del todo", y que daba a la calle, al objeto de comprobar si había alguien dentro, describiendo que en el salón "no había luz" y tampoco "ruido", por lo que ha opinado que "en el salón no había nadie" a esa hora.

El padre de Marta ha relatado que ha estado un año sometido a tratamiento psicológico --"aunque lo he dejado, porque las pastillas me atontan"-- y cuatro meses de baja laboral. "Estoy desesperado por encontrar a mi hija", ha lamentado, añadiendo que "cuando detuvieron a Miguel pensé que se iba a acabar la agonía, pero después vino una versión y otra", por lo que "cualquier día iba a parecer que mi hija había desaparecido por arte del Espíritu Santo". "No nos están dando la oportunidad de enterrarla", algo con lo que "mejoraría mucho mi sufrimiento", porque "es un continuo machaque diario".

"SERÍA MUY IMPORTANTE RECOGER LO QUE QUEDE DEL CUERPO"

De su lado, la madre de la joven ha dicho estar "hundida" porque "para mí sería muy importante recoger lo que quede del cuerpo de mi hija, para tener ese descanso", al tiempo que ha asegurado que las distintas versiones ofrecidas por los acusados, en especial por Miguel Carcaño, "nos han producido una tortura infinita". "Cada versión me hunde más", ha afirmado, aseverando que "encontrar el cuerpo mejoraría mi sufrimiento y sería un alivio".

Eva Casanueva ha dicho que "no tenía un buen concepto" de Miguel, ya que "había tenido una relación con mi hija y ella venía a casa triste y enfadada", y ha narrado que el día de los hechos "Marta me dijo que tenía que aclarar algo con Miguel", el cual "tenía el perfil clásico del maltratador: primero te puteo y luego te hago un regalo". "Fue a las 1,30 horas cuando hablé por primera vez con Miguel, que me dijo que había dejado a Marta en casa a las 21,30 horas, por lo que colgamos, pero después lo volví a llamar, porque sabía que algo había pasado", ha apostillado.

La madre, que ha estado de baja laboral tras la desaparición por espacio de más de un año, ha aseverado que "escuchar las distintas versiones, primero que la violaron, luego que la estrangularon... ha sido una tortura infinita".

VISITA DEL TÍO DE MARTA A LEÓN XIII

En la cuarta jornada de la vista oral también ha prestado declaración el tío de Marta, Javier Casanueva, quien ha narrado que en la mañana del día 25 de enero, dentro de las tareas de búsqueda de su sobrina, "me desplacé hasta la vivienda de León XIII, y me abrió en actitud violenta el hermano de Carcaño; pensé que nos iba a pegar". "Tras ello, entré en el piso, que olía a limpio y estaba oscuro", ha relatado, añadiendo que "sólo me dijo que su hermano había dejado a Marta a las 21,30 horas en casa y se había ido a cenar a Camas".

Este lunes también han prestado declaración cinco amigos de la pandilla de Marta, tres de los cuales han señalado que, la tarde del 24 de enero de 2009, coincidieron con Miguel, el 'Cuco' y la propia Marta en una plaza donde solían reunirse. Dos de estos testigos han narrado que, tras conocer que Marta no había vuelto a casa esa noche, comenzaron a buscarla y, en primer lugar, sobre las 2,15 horas, se dirigieron a la casa de León XIII.

Allí, levantaron "un poco" la persiana que da al salón de la vivienda, pero "allí no se escuchaba ni veía nada, no había luz y estaba todo totalmente oscuro, por lo que nos fuimos", lo que contrasta con la versión ofrecida la pasada semana por la novia del hermano de Carcaño, María García, quien dijo que estuvo hasta las 2,00 horas estudiando en el salón para luego irse al dormitorio, donde dejó la luz encendida.

SAMUEL "ESTABA MUY DESABRIGADO PARA EL FRÍO QUE HACÍA"

Tras ello, prosiguieron la búsqueda por la calle Betis, donde, sobre las 3,30 horas, se unió al dispositivo el propio Samuel, el cual, "para el frío que hacía, venía muy ligero de ropa y desabrigado". "Samuel llevaba un chalequito, y yo estaba muerto de frío con un chaquetón puesto porque había llovido lo más grande", ha llegado a decir uno de los testigos.

Al finalizar la declaración del tío de Marta, se ha celebrado el careo, siendo el primero en intervenir el asesino confeso, que le ha dicho a Samuel que "lo único que te quiero decir es que digas dónde está Marta", pues "yo estoy en prisión y tu en la calle".

Ante ello, Samuel ha aseverado que "se cree el ladrón que todos son de su misma condición", y ha añadido, visiblemente nervioso y con frases entrecortadas: "explícame tú quien se va a creer en esta sala, con el máximo respeto a todas las personas que hay en la sala... quién se prestaría a ayudar a la desaparición de un cuerpo cuando otra persona ha sido el que la ha matado, porque yo no".

SAMUEL, A MIGUEL: "YO NO TE TENGO QUE DEMOSTRAR NADA"

"Y explícame cómo es posible que, supuestamente, tu me estés metiendo en una hora, de 21,15 a 21,30 horas aproximadamente, cuando a esa hora estoy yo con mis testigos en Montequinto", y todo ello "con un coche inventado". "Me acusas sin aportar pruebas", le ha espetado Samuel a Miguel, quien se ha referido a los billetes de autobús que demostrarían que el primero acudió a Sevilla en ese medio de transporte, los cuales "nunca han aparecido".

Miguel ha puesto de manifiesto que "yo intento demostrar que tú ese día no cogiste el autobús, intento decir que viniste a mi casa en coche y no en autobús, como tú dices, y que tampoco apareciste por la casa es mentira".

"En esa época tu eras más listo que yo, por eso tú estás en libertad y yo en prisión", ha agregado Miguel, lo que ha motivado que Samuel, visiblemente alterado y en tono sarcástico, haya respondido: "y yo soy Forrest Gump o el primo de Forrest Gump y desde Montequinto a tu casa tardo cinco minutos, ¿no?".

"Yo a ti no te tengo que demostrar nada, a quien se lo tengo que demostrar es al juez", ha dicho Samuel, añadiendo que "es fácil acusar en este país sin aportar pruebas; haz como yo, que hablo aportando pruebas".


Fuente: Europa Press (www.europapress.es)