El Frente Nacional denuncia la pasividad del Gobierno ante las provocaciones británicas.

Las autoridades británicas de Gibraltar llevan semanas provocando incidentes con patrulleras españolas. El último, el ametrallamiento de una boya con la bandera española por parte de una patrullera del Reino Unido, sobrepasa todos los límites permisibles.
Gran Bretaña reivindica unas aguas territoriales que el artículo 10 del Tratado de Utrecht no le reconoce y que la diplomacia española, en buena lógica, nunca ha reconocido. Sin embargo, la dejadez y la cobardía de nuestras autoridades han ido permitiendo a los británicos actuar de facto como si tuviesen alguna jurisdicción en las aguas aledañas a la roca.
Además, la colonia británica se ha convertido en un paraíso fiscal, un centro de blanqueo de dinero procedente del tráfico de drogas y de armas y un domicilio de empresas ficticias dedicadas a estos negocios sucios y a la especulación financiera. De hecho en Gibraltar existen hoy 28.500 sociedades mercantiles con una población de 29.000 habitantes. Y no parece probable que cada llanito, niños incluidos, sea un empresario.
Ya va siendo hora de que algún gobierno español vuelva a ejercer la diplomacia de la firmeza frente a la prepotencia y la ilegalidad de las actuaciones británicas en Gibraltar. El Frente Nacional exige que se vuelva a cerrar la verja y que el tráfico de personas y mercancías entre España y Gibraltar se interrumpa y no se reanude ni por razones humanitarias.


Fuente: Web del Frente Nacional (www.frentenacional.es)