71 años han pasado ya desde que terminó la Guerra Civil Española. Sin embargo, ha llovido tanto desde entonces que muchos desconocen (sea por su parte y la de otros) quienes eran los buenos y quienes los malos.
Actualmente impera la versión del “gobierno legítimo y democrático” atacado por “militares fascistas” y que se ve obligado a “defenderse”.
Esa defensa consistía también en asesinar curas y monjas, que según algunos eran enemigos peligrosos de la “legitimidad y legalidad republicana”.
Por mucho que quiera, hay cosas que no pueden ocultar.
Como que en nombre de la democracia destruyeron patrimonio histórico y cultural de contenido religioso.
Como que en nombre de la democracia asesinaron a 10000 personas en una sola localidad madrileña (y encima el responsable pasea tranquilamente por nuestras calles y es homenajeado como héroe).
Como que en nombre de la democracia se justifica el intentar destruir todo rasgo de espiritualidad e idealismo del español de la época.
Tantas justificaciones de la democracia llevan solo a imponer y destruir a los demás, y la II Republica española tuvo una forma de ser parecida a los Estados Unidos actuales.
Imponer su poder con la excusa de la democracia.
Tal descontrol y orgia de sangre, de la que el mayor culpable fue Azaña, incapaz de controlar a sus compañeros de coalición electoral, provocó que los militares se pronunciaran para poner orden.
El resultado fue una guerra civil sangrienta de casi tres años en los que los españoles se mataron unos a otros abriendo heridas que jamás volverán a cerrarse, por mucho que se empeñen algunos en hacerlo, y sobre todo, por que otros quieren reabrirlas para sus intereses.
Antes de la victoria y del bando firmado por el general Franco donde anunciaba la victoria del bando nacional, la situación en el bando republicano era tan insostenible y desesperada que Julián Besteiro, uno de los pocos socialistas que creía en la democracia como sistema (no olvidemos que los otros solo la utilizaban cuando les interesaba) dio un golpe de Estado en su bando para que se rindieran y dejara de morir gente en los campos de batalla.
Después de todo esto llegó la tan famosa “represión”. ¿Es que acaso los marxistas hubiesen sido piadosos de sus enemigos?. Está claro que no.
Finalmente, La Nación Digital recuerda a todos los patriotas españoles que en tal día como hoy se debe recordar mas que nunca a los Caídos por Dios y por España, no sin afirmar que los héroes deberían estar en la mente de todos siempre.
Soldado Vikingo
jueves, 1 de abril de 2010
Tags
# Editorial
About Anónimo
Templatesyard is a blogger resources site is a provider of high quality blogger template with premium looking layout and robust design. The main mission of templatesyard is to provide the best quality blogger templates which are professionally designed and perfectlly seo optimized to deliver best result for your blog.
Editorial
Sección:
Editorial
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
© 2011 La Nación Digital /La Nación Digital y la administración se reservan los derechos de opinión y no tienen por que coincidir ni se responsabilizan de las opiniones vertidas por los colaboradores y/o visitantes en el interior de la web. A su vez se reservan los derechos para colaborar con las autoridades en caso de infracción de cualquier artículo del código penal.
1 comentario:
cierto...aunque algunos nunca aceptaran haberla perdido
Publicar un comentario