La Junta de Andalucía regaló 2,5 millones a una correduría por un ERE en el que no intermedió.

El fondo de reptiles del que ha dispuesto la Junta de Andalucía entre 2001 y 2009 no sólo ha servido para subvencionar con dinero público y sin control legal los ERE con vidas laborales falseadas, sino también para pagar altas primas a aseguradoras que no han intervenido en la planificación de esos expedientes de regulación de empleo.

Es el caso de Ingotor Seguros, una sociedad que cobró 2.403.570,83 euros en 2003 de la Administración andaluza. Según ha podido saber LA GACETA, la cantidad viene de la comisión por su supuesta participación en la elaboración de los costes de las prejubilaciones de los empleados de Minas de Riotinto (Huelva).

Sin embargo, esta intermediaria radicada en Jerez de la Frontera (Cádiz) y que en 2003 contaba con sólo cinco trabajadores no participó en ese ERE, sino que fueron Vitalicio Seguros y Vitalia las encargadas de formalizar un seguro colectivo de rentas, con el fin de gestionar las pensiones de los trabajadores despedidos.

La primera, Vitalicio Seguros, fue la auténtica adjudicataria de la póliza para cubrir el futuro de los prejubilados de Riotinto y recibió de la Junta de Andalucía más de 90 millones de euros para subvencionar el ERE; la segunda, Vitalia, actuó como asesora e intermediaria de la operación.

En entredicho
Sin embargo, este hecho no fue un obstáculo para que el director general de Trabajo y Seguridad Social, el socialista Francisco Javier Guerrero, ordenase a Vitalicio Seguros el pago de una comisión a Ingotor, que vino a sumarse a la que sí le correspondía a Vitalia.

A petición de este alto cargo de la Junta, los costes de los trabajos de asesoramiento e intermediación que Ingotor no realizó se cargaron contra el importe total de la póliza. De esta manera quedan en entredicho las declaraciones del ex consejero de Empleo y Desarrollo Tecnológico de la Junta en 2003, José Antonio Viera, quien ha asegurado que la Junta de Andalucía no tiene nada que ver en las prejubilaciones falsas que aparecen en ERE como el de Mercasevilla o Minas de Riotinto, ya que son estas empresas las que directamente contratan a la aseguradora, que a su vez elabora y garantiza los planes de pensiones.

No obstante y conforme a la documentación a la que ha tenido acceso este periódico, fue la Junta, a través del ex director general de Trabajo, la que no sólo escogió, sino que ordenó el pago de dinero a una intermediaria de los seguros que no llegó a intervenir en el ERE de Minas de Riotinto. “La Junta de Andalucía no las contrata”, insistía Viera, actual secretario del PSOE de Sevilla, en referencia a las aseguradoras.

Dos ingresos
Según la información recabada por LA GACETA, el porcentaje pactado inicialmente tanto para Vitalia como para Ingotor debía ser de un 15% del total del importe del expediente de regulación de empleo, esto es, de 13.522.772,34 euros.

Al menos en 2003 y para Ingotor este pago quedó limitado a dos ingresos; el primero, de 1.276.400,92 euros, efectuado por Vitalicio Seguros, y el segundo, de 1.127.169,91 euros a cargo de Generali España, grupo al que pertenece Vitalicio.

La Dirección General de Seguros, adscrita al Ministerio de Economía y Hacienda, explica que no hay un baremo estándar que fije la cuantía que percibirá la agencia de seguros en forma de prima por su asesoramiento en la elaboración del seguro colectivo de renta. Eso sí, quien contrata la cobertura del ERE –en este caso la Junta– es el que decide si acepta o no el pago de la comisión propuesta por el corredor.

Por otro lado, estas primas van en función del riesgo que asume la aseguradora, y en el caso de un expediente de regulación de empleo subvencionado por la Junta, puede considerarse mínimo. Fuentes del sector apuntan que lo habitual es que no supere el 2,5% de la cantidad total destinada en cada caso a cubrir las pensiones futuras de los trabajadores.

Al cierre de esta edición, la Junta no ha respondido sobre si este procedimiento de contratación de dos intermediarias es habitual, por qué concepto se le pagó a Ingotor ni cuál es la comisión que suele concederse a estos agentes.



Fuente: La Gaceta (www.intereconomia.com)