Messi maniata al Atlético de Madrid.

El FC Barcelona arrolló con comodidad al Atlético de Madrid y le endoso una 'manita' en el Camp Nou en un encuentro que no defraudó y que fue tan espectacular como acostumbran a ser los enfrentamientos entre azulgranas y colchoneros. Villa abrió el marcador en el minuto ocho con un tiro cruzado desde dentro del área. Antes del cuarto de hora Miranda marcó en propia meta el segundo tanto culé tras un rechace en una jugada rodeada de polémica por la intervención o no de Messi en ella. Sin esperar a llegar a la media hora, el argentino logró el tercero tras una buena acción individual. 'La Pulga' logró también el cuarto con una jugada individual de museo en la que hizo lo que quiso con todos los defensas rivales que le salieron al paso. Leo puso la guinda a su actuación completando su 'hat-trick' en los minutos finales tras una excelente conexión con Villa.

A pesar de que el Atlético de Madrid tuvo la primera ocasión clara del partido con un disparo al larguero de Tiago en los primeros minutos, fue el Barcelona el que comenzó el choque apretando a su rival y con el gol entre ceja y ceja. Con el equipo rojiblanco replegado atrás para evitar el vendaval azulgrana, el encuentro se convirtió en un monólogo de acoso y derribo local sobre los hombres de Manzano. Un pase largo y cruzado de Xavi resquebrajó el muro defensivo del conjunto visitante, permitiendo a Villa controlar con comodidad el balón en el área y batir por bajo a Courtois tras romper con un quiebro a Miranda. Pero no quedó ahí el desacierto del defensa brasileño. Justo cuando se cumplía el cuarto de hora de juego, el central marcó en propia puerta el segundo de la noche tras un rechace en el área colchonera en una jugada en la que Messi estaba en posición ilegal pero en la que queda la duda de si influyó o no en ella.

Los dos mazazos seguidos no consiguieron desmoronar al Atlético, que siguió mostrándose firme y metido en el partido hasta el momento en el que Messi recogió un balón en la banda derecha y se deshizo de hasta cuatro rivales con un solo regate que le sirvió para plantarse ante Courtois y marcar el tercero de los suyos con una facilidad asombrosa. Con la goleada instalada ya en el marcador, el conjunto madrileño fue un juguete en manos de un Barcelona que monopolizó la posesión del balón y que pudo ampliar su ventaja antes del descanso con una vaselina antológica de Cesc Fábregas que acabó estrellándose en el larguero de la portería atlética.

Las entradas al campo de Salvio y Arda Turan en sustitución de Mario Suárez y Reyes fueron las únicas novedades tras el intermedio. En cuanto la posesión, las llegadas y las ocasiones todo siguió igual, el Barcelona no dio opción alguna a un rival que se convirtió en un quiero y no puedo en cada uno de sus intentos de adelantar posiciones para visitar las inmediaciones de Víctor Valdés, un espectador de lujo en su partido 300 en Liga. Sin atisbo alguno de que la tónica del choque pudiera cambiar, el encuentro sirvió para ver el regreso de Piqué a los campos tras superar la lesión en su gemelo de la pierna izquierda que le ha tenido un mes en el dique seco. El defensa sustituyó a Busquets en los primeros minutos de la segunda mitad para coger minutos.

Mediado el segundo acto, Villa tuvo en sus botas el cuarto gol de la noche en un mano a mano con Courtois que el portero belga logró adivinar. La ocasión del asturiano fue una más del goteo incesante de embestidas culés sobre la meta rival, que tuvo como consecuencia el cuarto gol local, una auténtica obra maestra de Leo Messi en la que el argentino hizo lo que quiso con la zaga rojiblanca. El delantero azulgrana completó su 'hat-trick' con el quinto gol del Barça cuando el partido agonizaba tras una excelente pared con David Villa. El Barcelona sumó tres nuevos puntos con total merecimiento en un partido que dominó de principio a fin y en el que el Atlético de Madrid le duró tan sólo quince minutos. Los de Manzano no tuvieron opción en el feudo azulgrana en una noche en la que Falcao no existió y fue una isla en el ataque rojiblanco.


Fuente: AS (www.as.com)