Las Fuerzas de Defensa israelíes (IDF) comenzaron el 27 de diciembre de 2008 la Operación Plomo Fundido, que se prolongó hasta mediados de enero y en la que murieron 1.400 palestinos y 13 israelíes.
Abu Zuhri ha denunciado, durante una comparecencia ante periodistas recogida por la agencia de noticias palestina Maan, que Israel cometió "crímenes de guerra" en esta ofensiva, citando como prueba el polémico informe Goldstone que así lo acreditó. A su juicio, forma parte de un "genocidio" que el pueblo palestino sufre "desde que sus tierras fueron ocupadas en 1948".
"En lugar de ser borrada del mapa, Gaza se ha convertido en la quibla (dirección que apunta hacia La Meca) para el pueblo libre de todo el mundo y un símbolo de dignidad", ha asegurado Abu Zuhri. El portavoz de Hamás ha subrayado que las amenazas de otra posible ofensiva no asustan a la milicia ni a los 1,7 millones de personas que residen en el territorio costero y, en cambio, son un síntoma del fracaso moral israelí en su lucha contra la resistencia.
Abu Zuhri ha criticado también el bloqueo que Israel mantiene sobre la Franja de Gaza. Este castigo, impuesto desde 2007 para impedir que las milicias reciban armas, "no ha cumplido los objetivos de Israel" porque, según Hamás, se ha encontrado "con la firmeza del pueblo palestino".
El portavoz de Hamás ha asegurado también que su grupo sigue comprometido con el proceso de reconciliación iniciado con Al Fatá, la facción que controla la Autoridad Palestina y, por tanto, Cisjordania. Esta reconciliación contribuirá a que los palestinos logren su independencia y pongan fin a la ocupación, ha apostillado.
Fuente: Europa Press (www.europapress.es)
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