Hungría cede ante la presión de la Unión Europea.

El primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, dijo hoy que ha remitido una respuesta a la Comisión Europea (CE) en la que muestra su voluntad de enmendar los puntos de la Constitución que puedan generar dudas respecto a su compatibilidad con los valores de la Unión Europea.
Orbán participa hoy en el Parlamento Europeo en un debate en torno a las dudas que despierta la Constitución húngara y en el que también interviene el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso.

"Ya me he comunicado con Bruselas y he trasladado que no habrá problema en clarificar sus dudas", indicó Orban.
El presidente de la CE confirmó que hoy mismo recibió la misiva de Orbán, en la que expresa su predisposición a enmendar la legislación húngara.

La CE anunció ayer la apertura de tres procedimientos sancionadores contra Hungría por la incompatibilidad de sus polémicas reformas legislativas con el derecho de la Unión Europea.
Los procedimientos se dirigen contra las reformas que amenazan la independencia del Banco Central Húngaro y la autoridad responsable de la protección de datos, así como la jubilación anticipada obligatoria para los jueces.

Orbán, quien se mostró muy comedido y breve en su intervención en el debate, defendió la reforma constitucional con el argumento de que busca dejar atrás la herencia legislativa comunista que había en el país y destacó las dificultades a las que para ello han tenido que hacer frente.


Fuente: La Gaceta (www.intereconomia.com)