El Real Zaragoza se hunde.

a victoria del domingo pasado ante el Villarreal había hecho que el Real Zaragoza viviera una de las semanas más esperanzadoras de la temporada. Los medios de comunicación aragoneses hacían cálculos que colocaban a los de Manolo Jiménez fuera del 'farolillo rojo', aunque seguían en puestos de descenso.

Hoy se esperaba un bonito partido ante la Real Sociedad, pero el Real Zaragoza no luchó por la victoria. Los de Montanier empezaron sin prisa pero sin pausa: resistiendo las primeras ocasiones de los aragoneses y, sobre todo, buscando sus opciones. A los 17 minutos, con el primer gol de Agirretxe, el Real Zaragoza se vino abajo; cuatro minutos después, con el tanto de Carlos Vela, terminó el partido.

La Real fue el amo y señor del encuentro y la victoria le sirvió para desquitarse de la derrota en el derbi de la semana pasada ante el Athletic. Vela y Agirretxe pusieron en graves aprietos a Roberto, que con sus paradas evitó una goleada mayor. Mientras que Bravo fue un espectador más, sin casi intervenir en el partido.

Los de Manolo Jiménez no se encontraron cómodos en todo el partido, estuvieron muy desordenados y no crearon claras ocasiones de gol. El tercero gol llegó tras un grave error de Edu Oriol, que se dejó robar el balón ante De la Bella, que asistió a Agirretxe.

En la segunda parte, la Real Sociedad estuvo mucho más relajada y no buscaba con tanta ansia el gol, esperando que llegaran por los errores del rival. El Real Zaragoza, en cambio, se deshinchaba cada vez más. Lo único bueno del encuentro para los aragoneses es que el técnico aprovechó para dar minutos al canterano Ortí.

La impotencia de los zaragozanos quedó patente en la grada, cuando la Ertzaintza tuvo que desalojar a un grupo de aficionados que habían provocado varios altercados al enfrentarse a seguidores locales.

Lanzaro, que hoy portaba el brazalete de capitán, fue expulsado por dos claras faltas y no jugará la próxima jornada ante Osasuna.



Fuente: AS (www.as.com)