La Puntilla 13/ 01 / 2012

Tras un corto periodo de inactividad en esta sección, por motivos puramente personales y de falta de tiempo tras la preparación de las muchas novedades que se irán implementando de forma inmediata en las próximas semanas en La Nación Digital, vuelve a la carga esta sección (y por que no decirlo, tras 3 artículos escritos pero no publicados por la espera de unas mini entrevistas que iban ligadas a ellos y de las cuales aún estoy a la espera de respuesta) , pero variando algo en su constitución inicial, pues esta sección deja de ser una sección semanal, para poner la puntilla cualquier día y ante cualquier asunto, tal vez de forma mas breve que con anterioridad, pero si de forma mas contundente. Por esta falta de actividad, quiero escusarme ante los lectores y comprometerme a darle mas continuidad a la sección.

Y es que hoy, no se puede mas que poner la puntilla en la condena a Miguel Carcaño por el caso Marta del Castillo, recordemos, la joven Sevillana asesinada por Miguel Carcaño en la noche del 24 al 25 de enero de 2009 en un piso de León XIII (Sevilla), junto a un par de amiguitos y de la cual todavía no se ha encontrado el cuerpo. Hoy, finalmente, se ha conocido la sentencia del juez al asesino en cuestión, dictaminano una pena por un delito de asesinato, a 20 años de prisión (de los cuales no cumplirá ni la mitad) y la prohibición de residir en la misma localidad o ciudad donde lo hagan los padres y las dos hermanas de la víctima durante 30 años, así como de aproximarse a menos de 500 metros y de comunicarse por cualquier medio con ellos por el mismo espacio de tiempo. De igual modo, condena a Carcaño a indemnizar a los padres de Marta, Antonio del Castillo y Eva Casanueva, con 140.000 euros a cada uno de ellos, mientras que también deberá indemnizar a cada una de las dos hermanas de la víctima con 30.000 euros "por el daño moral causado" por la muerte y desaparición de la joven. Asimismo, absuelve al resto de acusados (su hermano, Francisco Javier Delgado; la novia de éste, María García, y Samuel Benítez) de los delitos de los que venían acusados, como son encubrimiento, profanación de cadáveres y contra la integridad moral.
Y es que el sistema judicial vuelve a hacer aguas dando la imagen de lo barato que sale delinquir en este país, en el que la vida de una persona, no vale mas que 20 miserables años en la carcel y un puñado de Euros que por jugosos que puedan parecer no repararán los daños causados a una pobre familia que sin comérselo ni bebérselo, se vieron golpeados por la mayor tragedia que puede sucederle a nadie. Un grupito de jóvenes amorales y rastreros que llevan desde 2009 riéndose de todo el mundo con el tema del cuerpo de la joven, han salido completamente impunes en su pulso a la justicia, y es por ello, que una vez mas quiero reivindicar que se endurezca de forma considerable el sistema judicial en este país, no es concebible, que la vida de una persona no valga nada, recordemos que el hecho en cuestión, no es que fuese un asesinato por una disputa o algo, no, si no que al señorito, como a muchos jóvenes ( pues desde años atrás llevamos ya una lista curiosa de casos similares), le dio una tarde por matar a su ex junto con sus amiguitos. Creo que poco mas hay que decir sobre este tema, a parte de añadir por último la esperanza en que el recurso de los padres haga que otro juez algo mas competente, haga, aun que sea una mínima justicia para este desgraciado heco.